Si el labial es un infaltable en la cartera, se debe a la cantidad de veces que las miradas de quienes nos rodean y la nuestra misma frente al espejo se detiene en la boca. Las labios cerrados, entreabiertos o en plena risa constituyen parte de nuestra personalidad ¿cómo no íbamos a pensar en ellos cuando las arrugas hacen su aparición?
Las líneas peribucales, es decir esas arrugas cortitas que se instalan alrededor de la boca, especialmente arriba del labio superior delatan sin piedad el paso del tiempo. Y si a eso le sumamos labios muy finos, el efecto visual es mucho más notable. ¿Cómo revertir ese efecto que se conoce hoy como “código de barras”? Con un elemento que es parte del propio cuerpo: el ácido hialurónico.
El ácido hialurónico es una sustancia que forma parte de muchos tejidos del cuerpo humano, técnicamente se trata de un polisacárido cuya propiedad principal es retener grandes cantidades de agua. Existe en una mínima proporción en nuestro cuerpo, alrededor de 15 gramos en un individuo de 70 kilos, pero es un componente vital del espacio extracelular (es decir el espacio entre las células) que permite, lubricar, absorber, llevar los nutrientes a la células y también deshacerse de los deshechos.
Específicamente en su función de relleno, el ácido hialurónico:
- Hidrata en profundidad la piel, coadyuvando en la producción natural de colágeno.
- Rellena. Con su propio volumen llena los intersticios “deshidratados” que dan lugar a las arrugas.
- Mejora inmediatamente el aspecto de la piel.
El tratamiento de relleno de labios consiste básicamente en la aplicación de ácido hialurónico en pequeñas cantidades, con una aguja muy muy fina. Es posible infiltrarlo en distintas capas de la piel para rellenar las arrugas, para ganar volumen o para perfilar y/o sensualizarlos
Es un tratamiento indoloro, que se realiza en el consultorio y que permite volver inmediatamente a hacer “vida normal”. Los efectos son inmediatos y alcanzan su mejor expresión a los 14 dias post aplicacion
El tratamiento no tiene contraindicaciones. Únicamente se recomienda no inyectar ácido hialurónico en aquellas zonas donde anteriormente se haya aplicado un producto no reabsorbible. Otra precaución es no hacerse ningún tratamiento de radiofrecuencia durante las dos semanas posteriores a la aplicación del ácido hialurónico. Al tratarse de una zona muy vascularizada, algunas personas refieren la aparición de hematomas o hinchazón en la zona tratada, que desaparecen al cabo de unas horas.
Una de las preguntas clave del relleno de labios, suele ser ¿cuánto dura su efecto? Al ser una sustancia que el propio cuerpo reabsorbe, con el tiempo el ácido hialurónico se “esfuma” así como su efecto. Sin embargo, esto ocurre entre 6 meses y 1 año luego de la aplicación. Y una ¡buena noticia!… las siguientes aplicaciones, dado el efecto acumulativo del ácido hialurónico, que dijimos que activa la producción de colágeno, demanda menos cantidad de producto.
El relleno de labios es un tratamiento que puede hacerse desde temprana edad, ya que algunas mujeres jóvenes a veces acomplejadas por labios excesivamente finos recurren al relleno para sentirlos -y verlos- más turgentes y pulposos.
Para determinar la fina línea entre lo estético y lo antiestético, no alcanza el espejo: será un profesional de la salud altamente especializado quien sabrá aconsejar cuál es el volumen de labios que armoniza con el rostro para no perder la naturalidad.
En la actualidad existe una verdadera batería de tratamientos, que iremos viendo poco a poco, para sentirnos mejor. Hombres y mujeres pueden recurrir a ellos por igual, siempre de la mano de un profesional de suma confianza.